Cake de vainilla

Tamizar juntos la harina y la levadura química.
Mezclar con las varillas los huevos, las yemas con el azúcar, el azúcar invertido, la sal y el extracto de vainilla.
Agregar los ingredientes secos tamizados, la leche y la mantequilla derretida caliente a 45/48 °C.
Reservar.
Para conseguir una textura mejor, dejar reposar durante 12 horas.

Fundir juntos todos los ingredientes. Reservar.

Mezclar los ingredientes secos, la mantequilla fría y el extracto de vainilla hasta obtener una masa homogénea.
Reservar.

Mezclar la mantequilla pomada con la harina.

El día anterior, realizar la masa de cake de vainilla y dejar reposar durante 12 horas a 4 °C.
Preparar el baño Opalys vainilla y reservar.
Realizar el streusel y pasarlo por un tamiz para calibrarlo. Hornear durante unos 30 minutos a 150 °C con el ventilador activado.
Untar los moldes de 18 cm × 4,5 cm × 4,5 cm con la mantequilla amasada y rellenar con 260 g de masa de cake de vainilla.
Cubrir con papel sulfurizado y una placa para obtener cakes bien planos.
Hornear durante unos 25 minutos a 160 °C.
Desmoldar y congelar los cakes.
Repartir el streusel de vainilla uniformemente sobre una placa con papel sulfurizado.
Fundir el baño Opalys vainilla a 40 °C y sumergir los cakes al revés con pinchos de brochetas. Antes de que cristalice por completo, colocar el cake encima del streusel.
Dejar que cristalice a 4 °C antes de dar la vuelta al cake.

Extender una fina capa de cobertura Opalys precristalizada sobre un mármol y espolvorear con vainilla en polvo.

Hacer virutas con ayuda de una cuchara de melón antes de que cristalice por completo.